lunes, 20 de diciembre de 2010

LA ARTIFICIOSIDAD DE LOS COMENTARIOS DE TEXTO

El que sigue a continuación, es, según lo que dicen en la red, un modelo de un comentario bien hecho, y es un comentario con algunos aciertos, un buen número de errores y demasiadas obviedades, algunas de ellas tan redundantes que parecen de chiste. No menciona la situación de enfermedad de su mujer que da origen al poema y por tanto nunca encuentra el tema principal. Empecé indignándome y acabé riéndome. . Y lo mejor (o lo peor) los comentarios que sobre el comentario han hecho algunos alumnos internautas, considerándolo un modelo a seguir, menos mal que al final hay algunos que se atreven a decir que el comentario es una chorrada. En fin ahí os lo dejo y ya me diréis.

Empiezo a sospechar que internet no es la herramienta educativa que nos están vendiendo. Esto es un mar de confusión.

A UN OLMO SECO
Al olmo viejo, hendido por el rayo 11A
y en su mitad podrido, 7b
con las lluvias de abril y el sol de mayo. 11 A
algunas hojas nuevas le han salido. 11B
¡El olmo centenario en la colina 11 C
que lame el Duero! Un musgo amarillento11 D
le mancha la corteza blanquecina 11C
al tronco carcomido y polvoriento. 11 D
No será, cual los álamos cantores 11 E
que guardan el caminojy la ribera. 11F
habitado de pardos ruiseñores. 11E
Ejército de hormigas en hilera 11 F
va trepando por él, y en sus entrañas 11 G
urden sus telas grises las arañas, 11 G
Antes que te derribe, olmo del Duero. 11 H
con su hacha el leñador, y el carpintero 11 H
te convierta en melena de campana. 11 I (i)
lanza de carro o yugo de carreta: 11 J
antes que rojo en el hogar, mañana. 11 I (i)
ardas de alguna mísera caseta, 11J
al borde de un camino; 7K
antes que te descuaje ujn torbellino. 11 K
y tronche el soplo de las sierras blancas; 11 L
antes que el río hasta la mar te empuje 11-
por valles y barrancas, 7 l (ele)
olmo quiero anotar en mi cartera 11F
la gracia de tu rama verdecida. 11M
Mi corazón espera 7f
también, hacia la luz y hacia la vida, 11 M
otro milagro de la primavera. 11 F
Antonio Machado Campos de Castilla



1. Localización
Antonio Machado nació en Sevilla en 1875, pasó su juventud en Madrid, y estudió en la Institución Libre de Enseñanza. Después de una estancia en Parra, estuvo durante cinco años en Soria como profesor de francés del Instituto. Allí descubrió y se identificó con el paisaje castellano; allí se casó, y murió, a los dos años, su esposa Leonor. Pasó después a Baeza, Segovia y, por fin, Madrid. Al ser derrotado el ejército republicano, se trasladó a Francia y murió en Colliure, un pueblecito cercano a la frontera española, en 1939.Campos de Castilla (1912) significa el encuentro con Castilla, con el paisaje de sus tierras altas donde proyectará su estado de ánimo y encontrará la expresión de la realidad nacional e histórica de España. Hay también en este libro nostálgicos recuerdos personales, reflexión sobre los grandes temas de la existencia humana, preocupación patriótica en actitud crítica, pero todo está visto con una mayor objetividad. Por último, hay que notar la ampliación al paisaje andaluz y los elogios a diversos escritores contemporáneos: Rubén Darío, J.R. Jiménez, Unamuno, Azorín, etc.
2.-Métrica
Este poema está formado por treinta versos de arte mayor y menor, ya que son de once y siete sílabas (endecasílabos y heptasílabos) pero sin seguir ninguna regla aparentemente. Sin embargo, al tratarse de una combinación de versos de 7 y de 11 que riman a gusto del poeta, estamos ante una silva, modelo estrófico clásico que admite incluso laposibiidad de que algún vero quede suelto, como ocurre en este poema.La rima es consonante, menos en el verso vigésimo cuarto, que es un verso suelto, no rima.
Es encadenada menos en los versos 13 y 14, 15 y 16 y 21 y 22, en los que es abrazada.Se producen encabalgamientos entre los versos 5 y 6, 16 y 17, 24 y 25, 28 y 29.
3.-Argumento
A causa de su amor por la tierra de Castilla, el autor encuentra en éste un tema para su poesía, y en el caso concreto de este poema, se centra en la descripción de un olmo, que es una especie de árbol que abunda en el país, el cual se halla en la ribera del río Duero, de manera que consigue crear la imagen de un paisaje en la mente del lector, además de transmitir la pena que da el árbol agonizante, que ya es viejo y será destruido, ya por causas climáticas como por el hombre, pero también trayendo una brizna de esperanza por el hecho de la aparición de unas hojas nuevas.
4.-Tema.
Descripción sensible y patética de un viejo olmo, del cual resurge la vida gracias a la primavera.
5. Estructura
Este poema se divide en tres partes:La primera llega hasta el verso decimocuarto, en la que hace una descripción general del estado del árbol, y de su situación y entorno, citando también la aparición de las hojas nuevas con la llegada de la primavera, y también lo compara con otra especie, los álamos.
En la segunda parte, que ocupa casi todo el resto del poema exceptuando los tres últimos versos, el poeta expresa su deseo de dejar constancia escrita de la aparición maravillosa de esas hojas entre tanta muerte y podredumbre, después de haber citado todo lo que puede ocurrirle al árbol en tal estado.
Los tres últimos versos formarían la tercera y última parte, ya que en ellos no se habla ya del olmo, sino que se expresa un deseo una esperanza.

6. Análisis de la forma partiendo del fondo.
Antonio Machado, un hombre serio, introvertido y solitario, cuyas principales preocupaciones fueron meditar, pasear, leer, asistir a tertulias y escribir, compuso este poema posiblemente durante alguno de sus paseos por el paisaje castellano, uno de los principales temas de su poesía. En este caso, sus escritos van dirigidos a un árbol, en concreto a un olmo,[especie abundante en España} del que consigue extraer,
con sencillez, detalles y reflexiones que se asemejan a la realidad del ser humano, porque en la obra a la que pertenece este poema, el autor reflexiona sobre los grandes temas de la existencia humana, angustiándose por el paso del tiempo y la muerte, tal vez a causa del fallecimiento de su esposa Leonor.
Así que, en este poema a comentar se puede hallar, bajo la simple apariencia de una poética descripción de un árbol de su amada Castilla, un segundo sentido, pudiéndose comparar con una vida humana, o mejor dicho, con cualquier vida de un ser humano, con su primera exuberancia de juventud, la madurez y el posterior deterioro con el paso de los años.Pero no todo el poema gira solamente en tomo a la idea del envejecimiento de las cosas o personas, sino que el poeta precisamente se centra, entre la ruina del olmo, en una pequeña esperanza de resurgimiento de la vida, en forma de hojas verdes nuevas con la llegada de la primavera, del mismo modo que cuando nosotros muramos otros ocuparan nuestro lugar en la humanidad.
Al principio del poema, se hace una descripción del protagonista, el olmo, el cual es ya viejo y las vicisitudes de su existencia, en este caso climáticas lo han. dejado malparado, ya que está:
“…hendido por el rayo y en su mitad podrido,”
es decir, le cayó un rayo encima que lo dejó casi destruido y además está podrido por dentro hasta la mitad. En estos dos primeros versos hay una gran utilización de los fonemas /o/, /i/, /e/, /d/ y con esta aliteración se produce una sensación de patetismo y desolación.
Pero tras esta primera triste imagen, se da paso a un hecho que es importante para el yo poético:
“con las lluvias de abril y el sol de mayo,
algunas hojas verdes le han salido.”
Utiliza un hipérbaton para cambiar el orden normal de la frase y damos al final un elemento alegre o esperanzador en contraposición con la anterior desolación. Y da un rodeo (perífrasis) para situarse en el tiempo en el que ha ocurrido la salida de esas hojas verdes, que es, aunque se sobreentiende, la primavera.
Él lo expresa mediante dos hechos característicos de esta estación: las frecuentes lluvias del mes de abril y la posterior llegada del buen tiempo en mayo.
Como ya se ha dicho, el poeta siente gran estima por las tierras altas de Castilla y en el poema nos situa al olmo, del cual hace otra vez referencia a su edad, calificándolo ahora de “centenario”:
“…en la colina
que lame el Duero!…”
Los signos de admiración dan más énfasis la frase, auydándonos a comprender lo que para el autor significa aquella tierra, Se produce un paréntesis en la parte descriptiva para damos una rápida visión del paisaje que está contemplando o que ha contemplado muchas veces y tiene grabado ya en la memoria, de manera que en nuestra mente se coloca ya al olmo en un ambiente, y no como se nos presenta al principio, en un entorno sombrío y solitario. Además, la colina en la que se encuentra el olmo está junto a un río, el Duero.
El yo poético lo expresa con el verbo “lamer’, es una prosopopeya ya que la colina no tiene lengua, pero esta expresión acerca más la colina al ríoío que si por ejemplo utilizara la expresión “al lado” o “junto”. Y este hecho, que la colina y el olmo estén tan cerca del río, embellece y da más vida al paisaje que se ha creado en nuestra mente, por estar el río siempre en constante movimiento y ser el agua símbolo de vida.La descripción que sigue del olmo parece que tenga diversas partes diferenciadas, ya que primeramente utiliza gran cantidad de adjetivos que nos ayuden a ver en qué estado tan lamentable se encuentra éste:
“…Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.
“Por la forma en que está construida esta frase, ésta toma velocidad, es decir, sepronuncia rápidamente, y jugando con los fonemas de los adjetivos (aliteración) /a/, /e/, /i/, /o/ nos produce una sensación desagradable, de podredumbre, de manera que queda relacionada con la descripción inicial, en la que ya se nombra este hecho. Posteriormente, el yo poético compara al pobre olmo con otros árboles, los álamos.
Estos árboles son de altura considerable y también se encuentran a los lados de los ríos y los caminos, como el yo poético indica, de manera que parece que los- guarden, que los protejan, aunque claro, eso no es posible ya que se trata de seres inanimados (prosopopeya). Además, él califica a estos ‘árboles de “cantores”, pero en realidad no se está refiriendo a los árboles en sí, sino a los pájaros que habitan en ellos, que no se ven escondidos entre las ramas y las hojas, pero que en cambio sí puede oírse su música, como si saliera de los árboles en los que habitan. Pero el yo poético los cita solamente para poder compararlos con su destartalado olmo y pasándose al tiempo futuro, lo ve completamente solo, sin ningún pájaro, en este caso ruiseñores, famosos por su alegre canto, que quiera habitar en él para darle vida y alegrarlo con su música. Después vuelve con su olmo para describir como un:
“Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él,…”
Naturalmente, no se trata de un ejército de tales insectos, pero los compara metafóricamente con uno porque sempre se encuentran juntas en gran número y porque su organización, como la de las abejas, es perfecta, sabiendo cada una lo que debe hacer.
Además, estos versos sirven para indicar, como los anteriores, que los únicos seres vivos que quieren vivir en él son las hormigas silvestres, que se alimentan de inmundicias, y las arañas, las cuales “urden”, es decir, tejen sus telas en las “entrañas”, en el interior podrido del árbol.

Aunque el yo poético habla del olmo en tercera persona hasta la mitad del poema, convirtiéndose estos versos en una descripción del estado del árbol, posteriormente se dirige al árbol como si éste pudiera contestarle, apostróficamente. De este modo, con este recurso, parece que le esté diendo alma al ser vegetal, de manera que al referirse al árbol, éste pierde un poco su situación de ser irracional, pareciéndose más a una persona y siendo más capaz de transmitir sensaciones al lector, como si se tratara, en su imaginación, de un anciano a punto de morir.
En todo el resto del poema hasta el final, excluyendo los tres últimos versos, el yo poético cambia el orden normal de la escritura (hipérbaton), en la que el sujeto y el verbo van primeros, seguidos de los complementos correspondientes. Este recurso lo utiliza para exponer, antes de la conclusión, todo lo que puede ocurrirle al olmo en su estado. El modo verbal cambia a subjuntivo, expresando la posibilidad, ya que el yo poético no sabe realmente lo que ocurrirá.
Al principio de cada uno de esos hechos que expone, utiliza el adverbio “antes” como anáfora, de manera que ya se supone que el yo’ poético quiere expresar un deseo o voluntad antes de que ocurra alguna de esas cosas, pero este deseo no se nos es revelado hasta cash el final del poema, finalizando ya toda la narración aunque después haya una pequeña reflexión personal .El primer caso que expone es:
“Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;”
Cambiando el orden normal de la frase, lo que primero se le aparece al lector es el verbo, en este caso “derribar”, de manera que éste ya se da cuenta enseguida de las cosas horribles que pueden ocurrirle al pobre árbol, después de haber sentido el patetismo de la descripción anterior. En este caso el que derriba al olmo es el leñador, para que después el carpintero lo transforme en algo útil. No puede utilizarlo para hacer cosas hermosas, ya que su madera no está en buen estado, así que el yo poético nos enumera algunos instrumentos de madera sencillos, que sean de utilidad y no para decorar y ser vistos, como por ejemplo los muebles, sino la melena de una campana, es decir, el armazón de madera que va unido a ella y que sirve para voltearla, o instrumentos que se utilizan en el campo, como una lanza de carro (la vara de madera que va unida por uno de sus extremos al juego delantero de un carruaje y sirve para dirigirlo) o un yugo de carreta (instrumento al cual, en forma de yuntas, se unen los animales de labor). Otra de las cosas que podría pasarle es que acabara ardiendo en un fuego tierra. Con el adverbio “mañana”, utiliza una metonimia, ya que no se refiere en realidad al día siguiente sino a cualquier día futuro.
El yo poético se vale de una metáfora, “rojo”, para describir el hecho que se estaría quemando. Pero en realidad, para el yo poético lo triste no es que acabara quemado, sino que ardiera en “alguna mísera caseta” seguramente de algún labrador que vive en el campo como indica el verso:
“al borde de un camino;”
y no en la ciudad, en la casa de alguien bien acomodado. Ese sería el verdadero deshonor.
Seguidamente da paso a otra posibilidad, al hecho que fuera arrancado por un torbellino. El término “torbellino” puede tener dos significados, ya que el árbol se encuentra en la ribera del Duero y el movimiento de las aguas de un curso fluvial
recibe el nombre de torbellino, al igual que el movimiento de rotación del aire. El verso:
” y tronche el soplo de las sierras blancas;”
podría explicarse si el poeta o el paisaje que describe se encontrara en el paso del Duero por Soria, ya que ese “soplo” podría traducirse por el aire frío que llega de las montañas nevadas del Sistema Ibérico, o si o puede ser que el yo poético se refiera a la futura llegada del invierno.
Y el último caso que expone es que el olmo pueda ser arrastrado por la fuerte comente del río, que se encuentra en su curso alto y tiene abundante caudal, hasta que éste lo dejara en el mar tras su larga travesía, pasando
“por valles y barrancas,”
Finalmente, el yo poético nos hace conocedores de su deseo. El lo expresa en los dos versos siguientes:
“olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.”
Después de haber visto el estado lamentable del olmo y la pequeña chispa de vi que de él brotaba, el yo poético desea guardar un recuerdo escrito del maravilloso hecho.
Pero en realidad, aunque parezca una contradicción, ya lo ha hecho en el mismo poema, de manera que ha dejado esta frase para el final, cuando ya ha hablado extensamente del árbol, y parece que el poema no haya sido compuesto intencionadamente, sino simplemente en la mente del autor. Este recurso expresivo da sinceridad y veracidad al poema. El yo poético, aunque ha descrito todo el árbol en general, en la idea principal en la que quiere centrarse y con la que quiere terminar el poema es en la aparición de esas nuevas hojas verdes, con la gracia de tu rama ‘Verdecida.” es decir, la hermosura de una rama a la que califica de “verdecida”, o sea, coloreada por el vivo color verde de las hojas nuevas. En los tres últimos versos parece que el yo poético se aparta ya un poco del tema concreto del olmo :
“Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.”
Estos tres versos parecen reflejar algún deseo o esperanza del yo poético, como todo el poema anterior hubiera sido un ejemplo para él mismo que le ayudara animarse y a mantener la esperanza.Cuando dice “mi corazón” se está refiriendo a su alma, a sus sentimientos, a él mis El yo poético utiliza el recurso de la metonimia, de tipo la parte por el todo. Y “espera”, dice,”otro milagro de la primavera.”,siendo el primero la aparición de las hojas verdes en el árbol muerto, pero en reali no se llega a descubrir que es lo que está esperando, aunque, eso sí, debe ir”…hacia la luz y hacia la vida,”
Tal vez se refiere a la aparición de una nueva vida, mientras otra se va al final de vejez. Y el término primavera podría tener un doble significado, refiriéndose metafóricamente a la juventud, fresca y vital.
Quién sabe si el poeta Machado recordaba su infancia y su juventud mientras paseaba por la orilla del Duero.
Campos de castilla
Comentario hecho por un alumno de 18 años-Nivel: Bachillerato, Selectividad


Esta es la gran hipocresía del método de comentario de texto, y es que se enseña a los alumnos a hacer un truco, un truco que se aprende sumamente bien, y que es poner palabrería y cháchara muy bien redactada, rizar el rizo, superlativizar los aciertos del autor o encontrar cosas que ni se propuso. El método, tan reglado, es el principal enemigo de la naturalidad con la que se debería hablar de poesía. Pero es la única forma que hay de iniciarse en ello, y seguro que este chaval será un lince y un rival temible que se defenderá siempre bien en cualquier recensión. Se deberías puntuar según el número de IDEAS que aparece en un comentario, y no en filigranas del tipo "mamá, mira qué bien escribo". Se les debería dar a leer "la muerte del abuelo" de Vicente Aleixandre, y que ellos hablen sobre el fondo del poema, antes que la forma y el recitado de recursos estilísticos. Espero haber desatado polémica y reflexionar, y que prenda la mecha de los comentarios.

EL UNIVERSO GALDOSIANO (o la novela como Tierra-2)


Al margen de que sorprenda la gran cantidad de obras de Benito Pérez Galdós y la gran calidad de todas ellas, se nota que se lo pasaba en grande escribiendo, consagrando su vida a la ampliación de su universo de ficción. Y es que es realmente original para la época que los personajes de una novela aparecieran en otra. Así, el médico que devuelve la vista a Pablo el ciego en MARIANELA, es hermano del funcionario de MIAU, y un personaje al que vimos por última vez abandonar su niñez para marchar a la ciudad a estudiar, reaparecerá luego en otra novela ya como adulto, y suma y sigue, tanto en los episodios nacionales como en sus obras aparentemente inconexas. Es una prolongación de las características del Realismo Español que los libros imiten a la vida, en la que nuestros amigos aparecen y desaparecen tras largo tiempo sin verlos, y nos cuentan de sus cosas. Me viene a la cabeza la dedicatoria de un romántico, Goethe, en el Werther, que invita al lector a que sus personajes sean sus amigos en ausencia de uno verdadero.

viernes, 17 de diciembre de 2010

LA ÚLTIMA ENSEÑANZA DE PATRONIO


Cuántos de nosotros no desearíamos tener en nuestra vida álguien tan sabio como Patronio. Un amigo leal que nos aconsejara siempre correctamente qué hemos de hacer, y encima nos contara un cuento. Pero al final del libro, en el cuento 50, Patronio advierte al Conde que "éste es el último consejo que va a darle". Patronio cree que es indigno que el Conde no obre y decida por sí solo, y que ya está preparado para tomar sus propias decisiones. Aún así, hay un último cuento añadido, el 51. Vemos aquí que Patronio considera que el Conde está dependiendo peligrosamente de su vasallo, y que es el conde el que ha de estar por encima en inteligencia porque ése es el orden normal de las cosas. Presumo que Patronio es Alfonso X y Lucanor su sobrino Don Juan Manuel, pero Patronio es un Sancho Panza ilustrado, un Sancho posterior a la muerte de Alonso Quijano, tal y como el que Andrés Trapiello describe que aprendiera a leer de manos del mismísimo Bachiller Sansón Carrasco.

martes, 14 de diciembre de 2010

¿Es Harry Potter un plagio?


A pesar de que parece son evidentes los paralelismos entre el joven mago y la saga del El Juego de Ender de Orson Scott Clark, cambiando magia por tecnología fantástica, hay una serie de cómic muy anterior a Potter llamada Books of Magic, cuyo protagonista, Tim Hunter, es Harry calcao. Y como el mago es más popular, en los tebeos se apresuraron a hacer crecer al protagonista para distanciarse de las películas. Esto demuestra que J.K. Rowling era una ávida consumidora de tebeos, porque ¿qué es Hogwart, sino la Escuela del Profesor Xavier para Jóvenes Talentos?

¿Vivimos ya en el Mundo Feliz de Aldous Huxley?


Y es que vamos en camino, a tenor del indiferentismo religioso, el ocio a toda costa, anestesiados con películas de violencia fantástica. El sensorama son las 3D, y el soma son los ansiolíticos. La manipulación genética de embriones da algo de miedo, y la sociedad está estresada, apuntándose cada vez más a gimnasios cubiertos y dejando de lado el deporte al aire libre. Abducidos en redes sociales, sin el gran apagón de TV y ordenadores que necesita el hombre para volver a su estado natural. Da repelús pensar que esta novela se escribió en 1932. Aldous Huxley, quizás uno de los primeros escritores que usaron el movimiento futurista de principios del siglo XX para crear utopías morales, es decir, que dejan un mensaje preventivo sobre el posible futuro mediante una sociedad temible y repelente, había escrito otra distopía mucho menos obvia que la de Orwell, llamada Brave New World. En la sociedad de Huxley, la gente no teme al gobierno totalitario que tiene el poder sobre el mundo entero: lo ama.

Huxley encontró un sustituto ideal de Dios en Henry Ford por la invención de la cadena de montaje, tecnología que trajo al mundo la posibilidad de la creación masiva de productos y de la masificación de los bienes. Ford es fuente directa del consumismo, del utilitarismo. Y pensando en el sentido actual de la Navidad, no puedo sino preguntarme qué hace falta para recordar a la gente el verdadero significado de las cosas. Quizá por todo esto viene una crisis económica mundial, en la que, como siempre, habrá gente que piense "menos mal que no soy un gamma".

martes, 7 de diciembre de 2010

Canción de hielo y fuego: un universo en expansión.


Tal como ha sucedido con algunos de los grandes libros que alcanzan la categoría de clásico, la saga Canción de hielo y fuego de George R. R. Martin está por fin haciéndose con su propia entidad visual a través de las fabulosas ilustraciones que varios artistas especializados están realizando a propósito de esta vasta trama fantástica de traiciones y guerras, y no necesariamente para las portadas de sus distintas ediciones. El que los libros de Martin inspiren obras pictóricas no relacionadas con su lanzamiento editorial ayuda en buena medida a asentar la saga como referente cultural y expanden enormemente el alcance de su universo. No hace mucho han salido a la luz unas cuantas obras del afamado ilustrador conceptual Ted Nasmith que ilustran los grandes castillos, palacios y fortalezas de Poniente. Forman parte de un calendario para el año 2011, en el que la saga adquirirá pleno protagonismo con el estreno de su adaptación en el canal HBO y el más que probable lanzamiento del esperado quinto volumen, Danza de dragones. Incluyen visiones hiperrealistas de Invernalia, Pyke, el Nido de Águilas, Harrenhal, Rocadragón, Los Gemelos, el Muro y las ciudades de Desembarco del Rey y Antigua. Aquí la página oficial de Nasmith, famoso por sus ilustraciones de los libros de Tolkien. Una imagen de Desembarco del Rey:


Pero Nasmith no es el único que se está afanando en esta exploración visual de Poniente, sino que otros ilustradores como el artista digital Marc Simonetti (web aquí) aportan un interesante grano de arena con obras como la siguiente, que representa la fortaleza de Pyke:


Aunque hay muchos más trabajos interesantes sobre la saga de Martin, quiero terminar con estos curiosísimos mapas de las principales ciudades mencionadas en los -hasta ahora- cuatro libros de la saga, a cargo de J. E. Fullerton. Impagables. Pueden verse aquí, e incluyo su versión del mapa de Dorne:

viernes, 3 de diciembre de 2010

El cementerio de Praga: ¡Umberto Eco ha vuelto!


¿Pero no decía usted, señor Eco, que no volvería a la novela tras La misteriosa llama de la reina Loana? Pues nosotros nos alegramos de que haya cambiado de opinión, porque una bibliografía de sólo cinco libros de ficción sabía a poco... si es que pueden saber a poco cosas tan impresionantes como El nombre de la rosa o El péndulo de Foucault, e incluso la menos conocida aunque inigualable Baudolino. Personalmente, ardo en deseos de hacerme tanto con esta nueva novela de corte folletinesco a lo Dumas, El cementerio de Praga, como con La isla del día de antes, título que me queda pendiente desde hace tiempo.

La sinopsis de contraportada:

«Me da vergüenza ponerme a escribir, como si desnudara mi alma.» Así empieza el relato vital del capitán Simonini, un piamontés afincado en París que desde joven se dedica al noble oficio de crear documentos falsos. Estamos en marzo de 1897 pero las memorias de este curioso individuo abarcarán todo el siglo XIX. La infancia de Simonini transcurre en Turín, con la permanente disputa entre su abuelo, un conservador monárquico antisemita, y su padre, un revolucionario dispuesto a luchar por las causas más nimias. Muy pronto, el joven demuestra sus habilidades para el engaño y se convierte en espía.

Umberto Eco en la actualidad. Imagen de La Mula.

Por el momento, y antes de haber leído la nueva obra del semiólogo italiano, he podido enterarme por ahí de que se adentra en el terreno tan trillado de la novela histórica, si bien es cierto que solamente Eco podría tener la altura moral suficiente para ofrecernos el canto del cisne de un género que él mismo convirtió en éxito allá por los primeros años 80. También se comenta, se dice, se rumorea, que el argumento del libro puede levantar ampollas entre ciertos sectores conservadores, seguramente los mismos que han sido vapuleados por los best-sellers de aeropuerto más vendidos (¿será la Iglesia otra vez?), aunque Eco sorprende otra vez por la frescura de un autor que no renuncia a escribir como lo haría un joven y rebelde debutante. Las expectativas son altísimas, a la espera de formarnos un criterio propio.